El sábado 11 de marzo Federalistes d’Esquerres celebró la “I Jornada de políticas lingüísticas dentro de una España Federal”, con el objetivo de introducir un debate sereno y polifónico al respecto. Jornada inédita en Cataluña si tenemos en cuenta el grado de polarización política que a veces se genera en torno a este tema.
Desde que en nuestro país existe democracia hemos vivido una progresión sobre el tratamiento de la lengua que empezó con la idea de normalizar el uso del catalán, con lo que la mayor parte de los catalanes nos sentíamos identificados. Pero este objetivo de “normalización” ha terminado, en manos de los gobiernos nacionalistas, con la idea de que el castellano es ajeno a nuestra comunidad. Algo que todas las estadísticas y la realidad de la calle desmienten. Ya sabemos que el nacionalismo -sea españolista o independentista catalán- entiende que la normalización lingüística pasa por la homogeneización de la población, imponiendo el uso del idioma de turno donde toque. Ahora hemos llegado al extremo de decir que dos asignaturas en castellano en la escuela es una situación intolerable y al que parece un contrasentido: el uso del catalán, como cualquier idioma impuesto, comienza a disminuir en los patios de las escuelas.
Los expertos y los que hemos vivido (como la mayoría de los catalanes) en situaciones de convivencia de diferentes idiomas, sabemos que para dominar una lengua se necesita que los usos se extiendan a todos los ámbitos de la vida. Por eso, un sistema de inmersión lingüística que haría, teóricamente, que los niños sólo hablasen catalán en el aula y sólo castellano en el patio llevaría al fracaso en el aprendizaje de las dos lenguas y tendría consecuencias en la potencia social de todo el territorio en el futuro. Tampoco serviría como ascensor social para quienes provengan de situaciones más desventajosas. Nosotros, empeñados en la defensa del catalán, queremos que sea un idioma querido, no impuesto. Ni tampoco queremos que la defensa del catalán implique perder la riqueza de las otras lenguas con las que convivimos.
Estudios científicos y el empirismo demuestran que el rendimiento escolar disminuye si el aprendizaje en los primeros estadios de la escolarización no se realiza en la lengua materna. A tal efecto, ponemos el enlace a un artículo en el que se habla del tratamiento de las lenguas en la Educación según la UNESCO https://www.unesco.org/es/articles/dia-internacional-de-la-lengua-materna-la-unesco-pide-los-paises-que-impartan-educacion-en-lengua
En la jornada del 11 de marzo, tuvimos ocasión de escuchar a ponentes de prestigio con datos objetivos de rendimiento escolar en Cataluña, en relación a los problemas lingüísticos de los alumnos no catalanohablantes. También, cómo se hace el tratamiento de las lenguas en países plurilingües de carácter federal, que no tiene nada que ver con lo que hacemos en Cataluña.
Teniendo en cuenta que la educación debería preparar a los futuros ciudadanos para los tiempos que vendrán, sería deseable que la política lingüística sea correctamente evaluada y dispongamos de datos oficiales fidedignos sobre el impacto que tiene en el aprendizaje. Quizás sí que nuestro modelo es un modelo de éxito, pero preferiría escuchar esta afirmación tan rotunda con datos científicos actuales en la mano, que me lo demostraran.
Nosotros los federalistas sabemos, por experiencia, que a algunos políticos les resulta rentable la polarización. Pero lo nuestro es el debate sereno y así nos mantendremos. El acto realizado el pasado sábado y nuestro documento Llamamiento federal por el entendimiento lingüístico, publicado en nuestra página web así lo demuestran.
Mireia Esteva
Presidenta de Federalistes d’Esquerres