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El llamado ‘proceso’ representa una propuesta de solución unilateral al problema político que se ha planteado en Cataluña. El federalismo, en cambio, es una solución compartida a la que solo se puede llegar mediante el pacto y la negociación entre todas las partes

Esta fue una de las ideas que se discutieron el pasado 2 de diciembre en el acto ‘Federalismo para una Cataluña sin fronteras’ organizado por Federalistes d’Esquerres en Manresa.

Manresa1En el acto intervinieron Joan Botella, decano de Ciencias Políticas de la UAB y vicepresidente de Fed, y Anna Estany, catedrática de Filosofía de la Ciencia de la UAB y miembro de la junta Fed.

Estany abordó una serie de cuestiones en torno al federalismo como la necesidad de buscar las bases racionales y emocionales de la opción federal y planteó que el federalismo es la mejor forma de gestionar la diversidad de forma democrática. “La equidad entre los territorios que forman parte de la federación se concreta a partir de los valores de fraternidad y solidaridad, lo cual no significa homogeneidad”, señaló.

Manresa3Joan Botella hizo, por su parte, un análisis de la situación actual, incidiendo en las dificultades e incertidumbres en las que Cataluña se ve inmersa en estos momentos. “En España hay una voluntad de reestructuración del Estado y también aliados para encontrar una solución. Los partidarios de una solución de este tipo somos mayoría en Cataluña y también en España”, aseguró. Botella centró parte de su intervención en caracterizar el federalismo desde la perspectiva política e institucional y explicó cómo funcionan las relaciones entre los distintos territorios federados en este modelo y cómo afectan a sectores concretos como la cultura, la sanidad y la educación. “El federalismo no es solo un ideal, es una solución práctica a gobernanzas complejas”, concluyó.