- «Lo que ocurre en este momento no es un problema exclusivamente catalán sino que Cataluña es el epicentro de una crisis que afecta a la arquitectura institucional española y europea» Manuel Cruz
- “La cuestión es que no tenemos más remedio que ponernos de acuerdo, dentro de Cataluña y con España. Incluso si se llega a la independencia, tendríamos que ponernos de acuerdo para repartimos lo que tenemos en común» Victoria Camps
“El federalismo es diálogo y el diálogo es la operación en la que uno corre el riesgo de cambiar de posición, de dejarse convencer y de atender a las razones de los otros” Es lo que ha reivindicado el presidente de Federalistes d’Esquerres, Manuel Cruz, durante el debate sobre “El modelo adecuado de gobierno para Cataluña” organizado por el Colegio Oficial de Psicólogos de Cataluña.
Manuel Cruz y la vicepresidenta de Federalistes d’Esquerres, Victoria Camps, debatieron con dos representantes de la Asamblea Nacional Catalana”: Dolors Marín y Miquel Strubell.
“Los federalistas creemos que lo que ocurre en este momento no es un problema exclusivamente catalán sino que Cataluña es el epicentro de una crisis que afecta a la arquitectura institucional española y europea. Creemos también que la ruptura con España no es una perspectiva de futuro y tiene más inconvenientes que ventajas. Compartimos parte del diagnóstico de los soberanistas en el sentido de que las cosas deben cambiar pero no creemos que la respuesta sea la secesión” aseguró Manuel Cruz.
Victoria Camps, en su calidad de catedrática emérita de ética, cuestionó, por su parte, que se planteara si es más ético asumir la postura independentista o federalista. “Estamos en una sociedad que le agrada el blanco y negro. Pero la respuesta es que esto no es una cuestión ética sino puramente política. Las dos son opciones legítimas. Aunque yo creo que la federalista es más justa porque abarca un universo más amplio: no queremos solo la justicia para los que estamos dentro de Cataluña sino mucho más allá”, afirmó.
“Todos queremos a Cataluña, todos queremos que se repartan los recursos de manera más justa y que haya un reconocimiento de la diversidad. Estos son hechos. A partir de estos hechos unos deducen que se tiene que actuar de una manera y otros, de otra. Ninguna opción es racional y lo que hay detrás son sentimientos, sentimientos no compartidos por todos los ciudadanos de Cataluña”, constató Victoria Camps.
“La cuestión es que no tenemos más remedio que ponernos de acuerdo, dentro de Cataluña y con España. Incluso si se llega a la independencia, tendríamos que ponernos de acuerdo para repartimos lo que tenemos en común. Con el federalismo sucederá lo mismo: avanzar en el modelo federal implicará decidir que queremos tener en común y qué reservaremos para cada uno”, constató.
Interpelado por Miquel Strubell sobre si Cataluña era o no una nación, Manuel Cruz recordó que el estatuto de Cataluña, aprobado mediante un referéndum, ya reconoció que Cataluña es una nación. “No está en discusión. Otra cuestión es que este reconocimiento implique el derecho a tener un estado. En el mundo hay muchas más naciones que estados y el federalismo intenta dar solución a esta realidad. Los estados son un invento del siglo XIX. Hemos de avanzar hacia otro tipo de organización y yo creo que tiene que ser la federal”, afirmó.
