Resulta preocupante y excesivo el control consistente en la restricción del tránsito y controles en las vías públicas cuando concurran “indicios racionales” de “alteración de la seguridad ciudadana o pacifica convivencia”, conceptos de una grave indeterminación, que deja en manos de la Policía el control y la capacidad de coerción sobre las personas y la convivencia. «Ley de Seguridad Ciudadana: Represión más indefensión«, («Infolibre», 10 de agosto).