Esta semana nos ha dejado Enric Ferreras, uno de los socios que formaba parte de la gran familia de Federalistes d’Esquerres desde sus inicios. Muchos le conocían por su alias de Cosme Modolell que utilizaba con socarronería en redes sociales y en su blog que siempre estaba actualizado, y con el que también se prodigó en la radio y la televisión badalonesas como tertuliano e incluso como presentador del programa divulgativo Badalona camina. Recordaremos a Enric por su enorme afabilidad, por su sonrisa amable y por su entrega a la causa federalista que le llevó a crear con mucho éxito el grupo “Amigos, conocidos y saludados del federalismo” para intentar animar el debate federalista y del que algunos de nosotros tuvimos la suerte de formar parte.
Militante de piedra picada por la justicia social y el progreso, fue impulsor de Federalistes d’Esquerres en su ciudad, Badalona, y presentador de su multitudinaria puesta de largo en el Centre Cívic La Salut en diciembre de 2014. También apoyó a Federalistes d‘Esquerres en otras localidades del Barcelonés Nord, con las que además trabajaba en red en temas vecinales y relacionados con la gente mayor, presidiendo la Plataforma de la Gent Gran de Badalona.
El 1 de octubre anunció que estaría desaparecido durante un tiempo para someterse a un tratamiento contra el cáncer y a finales de enero explicó desde el hospital que llevaba unos días muy malos como consecuencia de la quimio y que ya no se sentía con fuerzas.
Sus ideas las plasmaba en su blog “Notas diversas” que existía desde 2009 y en el que se anunciaba a modo de bienvenida: “Todo aquello que se me ocurre tengo la mala costumbre de escribirlo. Aquí encontraréis todo, os puede gustar más o menos, pero siempre, siempre, es mi sincera y honrada opinión”.
Esperamos poder seguir encontrándote en tus escritos, Enric. En el último, fechado el 26 de septiembre de 2021, hacías un llamamiento a poner todo nuestro empeño en defender la civilización de la barbarie a través de los grandes principios humanistas de la libertad, la igualdad y la solidaridad. Intentaremos seguir tus consejos y tu ejemplo, que nos hacían mejores personas. Muchas gracias, compañero. Por el trabajo hecho estos años, por tu afecto y por el compromiso que te acompañó hasta el final. No te olvidaremos.
