Deberíamos convertir el procés en asignatura lectiva. De este modo, los alumnos favorables a la independencia tendrían argumentos un poco más sólidos. Reciclo material para imaginar el cuerpo académico de la asignatura
–Primer trimestre: título preliminar: La Constitución se fundamenta en la indisoluble unidad de la nación española, patria común e indivisible de todos los españoles . Es fácil considerar que esto es una atrocidad constitucional, pero hay que estar preparados para los argumentos del ateo no independentista: la Constitución francesa en su artículo 1º dice que «Francia es una república indivisible». La Constitución italiana en su articulo 5º dice que «la república es una e indivisible». La Constitución alemana lo mismo, y así por casi todo el planeta. Los alumnos deben estar, por lo tanto, preparados para descalificar cualquier texto legal.
–Segundo trimestre: literatura adversa. En el libro Just watch me, el primer ministro de Canadá durante el primer referendo de Quebec, Pierre Elliott Trudeau (natural de Quebec), manifiesta: «Solo quiero decir que todos hemos perdido en este referéndum. Si tenemos en cuenta las amistades rotas, las tensionadas relaciones familiares y los orgullos heridos, no hay nadie entre nosotros que no haya sufrido alguna herida que hemos de curar en los días y semanas que vienen». Vaya con el tío. En el referéndum ganó el no.
En el libro My years as a prime Minister, el quebequense Jean Chrétien, que era primer ministro durante el segundo referéndum (ganó el no), explica: «Me emocioné explicando a mis diputados la indecencia de que los independentistas me presentasen como un traidor a su gente».
Los alumnos deberán tener argumentos contra tanta sensibilería.
El déficit fiscal
–Tercer trimestre: ilustres independentistas dicen que al neutralizar el déficit fiscal se llega a los famosos 16.000 millones que se ganarían cada año con la independencia. En cambio, la fundación de CiU CatDem afirma que «la ganancia que obtendríamos varía en función de cómo está la economía» y que en el 2009 hubiera sido de tan solo 922 millones. Dice la fundación que neutralizar no tiene sentido: «Lo que estamos midiendo es la capacidad de autofinanciación de Catalunya como Estado independiente». Organizar un debate con alumnos favorables al CatDem y alumnos favorables a la millonada total.
–Máster final: el juez Santiago Vidal ha fijado las condiciones que han de cumplir los resultados electorales para que se puedan considerar un voto claro a favor de la independencia catalana: un 70% de participación y 66% del voto emitido favorable al sí. Dar argumentos al alumno de que con un solo voto favorable al sí ya vale, y punto pelota. Todos aprobados.
El Periodico, 5 de abril de 2015
