«Si no fuera porque ya estamos curados de espantos y vacunados contra sorpresas y contradicciones, llamaría la atención que aquellos a los que se les ha llenado la boca durante una década hablando de un presunto derecho (a decidir), sean tan poco respetuosos con los derechos ajenos cuando creen que estos pueden entrar en conflicto con los suyos.»
Los derechos no van al peso (El País, 9 de agosto de 2021)