«Lamentablemente el Gobierno catalán ni gobierna ni quiere gobernar para todos. Sin decirlo abiertamente, triunfa el absurdo criterio de «cuanto peor mejor» y en este punto, por desgracia, no se vislumbran diferencias entre los sectores independentistas.
Vamos muy mal, pero podemos ir peor si no se impone la cordura, la reflexión y una perspectiva a medio y largo plazo.»
Y ahora, qué? (El Periódico, 10 de febrero de 2019)