La Casa de la Cultura de Girona acogió el acto que contó con más de un centenar de asistentes y en el que Puigverd valoró que el federalismo permita la reflexión más allá de la dicotomía rupturismo/inmovilismo pero también se preguntó si será capaz de repartir el poder
(por Beatriz Silva) ¿Qué posibilidades tiene el federalismo de hacerse realidad?¿Cuáles son los caminos para desencallar la actual situación política?¿Podemos recuperar aún el estatuto de 2006? Son algunas de las preguntas sobre las que giró la presentación del libro ¿Qué es el federalismo? el pasado viernes en Girona que llenó el auditorio de la Casa de la Cultura de la Ciudad y que tuvo como protagonistas a dos de sus autores: Joan Botella, presidente de Federalistes d’Esquerres y decano de Ciencias Políticas de la UAB, y Victoria Camps, catedrática emérita de Ética de UAB y vocal de honor de Fed. El acto fue presentado por el escritor y periodista, Antoni Puigverd.
Entre los asistentes se encontraba el exconseller de Interior de ICV, Joan Boada, la primera teniente de alcalde socialista del Ayuntamiento de Girona, Silvia Paneque, el primer secretario del PSC en las Comarcas Gironines, Marc Lamuà, el secretario general del PSUC viu, Albert Miralles, el alcalde de Quart, Pere Cabarrocas, el diputado Rafel Bruguera, y el ex director general de Participación Ciudadana de la Generalitat y catedrático de Ciencias Políticas, Quim Brugué, entre otros.
“Es especialmente interesante que este acto se haga en Girona donde parece que sólo hay un discurso dominante lo cuál no es cierto”, constató Antoni Puigverd, el primero en intervenir, que valoró tanto el trabajo de Federalistes d’Esquerres como el libro mismo ya que, según apuntó, “ambos son una contribución al debate”, en un escenario dominado por “el independentismo y el inmovilismo del PP en el que se presentan dos opciones binarias en blanco y negro arrinconando los otros puntos de vista”.
Puigverd constató que la mayor parte de la sociedad catalana tiene doble sentimiento de pertenencia: “No parece sensato que tengan que escoger ni parece sensato plantear un dilema de tipo binario. Federalistes d’Esquerres es una corriente que busca abrirse camino y romper el debate blanco/negro que se ha instalado en la sociedad catalana desde hace unos años. Sólo por esto vale la pena este libro y este movimiento, para enriquecer la discusión y hacer posible que la reflexión vaya más allá de la crispada tensión entre rupturistas e inmovilistas”, señaló.
El escritor se mostró también pesimista respecto al futuro de la situación política y auguró que la tensión en torno a las reivindicaciones sobre la independencia y el inmovilismo del PP se prolongarán durante 10 o 15 años más. “Es por eso que las opciones inclusivas e integradoras como el federalismo tienen posibilidades de hacer un trabajo político e ideológico en unos años que habrá tensión y desgaste”, indicó Puigverd que se preguntó si el federalismo será capaz de repartir el poder que ahora se encuentra concentrado en una tecnoestructura difícil de romper, una cuestión frente a la que se mostró escéptico. “Lo que me agrada del federalismo es que no da una respuesta unívoca a una historia que no es unívoca sino plural e inclusiva”, añadió el escritor que reconoció también que ve muy difícil materializar tanto la opción federal como una posible independencia de Cataluña.
Joan Botella, el segundo en hablar, se refirió a las características del federalismo y señaló que es la manera cómo las sociedades complejas resuelven el problema de vivir juntos. “Es la manera que en política adopta el realismo: las cosas son complejas y hay que administrarlas”, señaló Botella que reivindicó que el federalismo no es una tercera vía entre una cosa y otra y explicó que los países federales no se han construido en un día, “son fruto de la discusión y del debate”.
El presidente de Federalistes d’Esquerres se mostró partidario de recuperar el estatuto de 2006 que, a su juicio, representa el punto de encuentro mayoritario en el que confluyeron todos los catalanes: “necesitamos recuperar el estatuto, reformar la Constitución para que, entre otras cosas, el propio estatuto tenga cabida, y avanzar en la integración en el proyecto europeo”, afirmó.
Victoria Camps explicó por su parte que Federalistes d’Esquerres nació por el deseo “de hacer oír nuestra voz entre los extremismos” y abogó por la necesidad de hacer las cosas de otra manera y superar la lógica del Estado nación. “La opción de recuperar el Estado nación para Cataluña es anacrónico, tenemos que avanzar hacia otro modelo que permita la convivencia, que no anule ninguna de nuestras identidades ni nos obligue a elegir”, señaló.
Camps recordó que los movimientos de ultraderecha que vuelven a resurgir en Europa “están arraigados en sentimientos nacionalistas, en querer ser sólo nosotros. La fraternidad que se asocia al federalismo es más ética que la actitud nacionalista de excluir al otro”, destacó.
En el turno de preguntas, Antoni Puigverd reconoció que su voz siempre ha sido discrepante y que esto no ha sido fácil para él y criticó la falta de autocrítica de una parte de la opinión pública española respecto a cuestiones que han afectado a los catalanes como la prohibición de usar el catalán.