La sala La Llar de Sant Sadurní d’Anoia fue el escenario en que se celebró, el jueves 17 de noviembre, el acto en que el presidente de ‘Federalistas de Izquierdas’, Joan Botella, presentó la entidad en esta ciudad y conversó con los asistentes al encuentro. Botella, decano de la Facultad de Ciencias Políticas de la Universidad Autónoma de Barcelona, recordó los orígenes de la asociación, creada para dar respuesta a la deriva centralista del Gobierno del PP y a quienes que optan por la independencia de Cataluña como única solución de futuro. «Desde hace 150 años, la izquierda apuesta por la vía del federalismo», afirmó en el acto que fue presentado por el exdirector de la Escuela Intermunicipal, Lluís Massana.
El presidente de ‘Federalistes d’Esquerres’ sintetizó su filosofía y talante en lo que llamó «las tres R: Reconocimiento de las diferencias, Respeto entre las diferentes comunidades y buen Rollo entre la gente de las diferentes Españas». Explicó que «la gran mayoría de la gente que vive en sistemas democráticos lo hace en países federales. Es la mejor manera de gestionar las diferencias. Los nuevos estados han nacido después del colonialismo o del desmantelamiento del bloque soviético. Nunca se han creado a partir de democracias».
Rechazó las críticas que presentan a los federalistas como «nostálgicos o bienintencionados pero anticuados», las que dicen que no hay federalistas en España o que el estado creado en base a la Constitución de 1978 ya es federalista. Según dijo, «cuando se pregunta a la gente qué estructura de Estado prefiere, la primera preferencia es la federal. Quiere las actuales autonomías con más recursos. También en Cataluña, donde las personas que aceptan el sistema actual o quieren ampliar las competencias autonómicas superan el 50%».
«Hemos creado autonomías pero el Estado no ha cambiado», explicó y añadió que «la costra antigua todavía la encontramos en demasiadas instancias. El búnker central no ha cedido y se debe cambiar». Por ejemplo, reclamó que se cambie la forma como se eligen los miembros del Tribunal Constitucional. Actualmente, cuatro de estos miembros los elige el Congreso, cuatro el Senado, dos el Gobierno y dos más el aparato judicial. «En Alemania, el gobierno no se le ocurre ni pensar en manipular este Tribunal. En cambio, aquí el gobierno «soba» el TC «, sentenció.
Joan Botella defiende que hay que recuperar íntegramente el Estatuto de Autonomía de 2016 y poner y reloj a cero. «Toda solución debe venir refrendada por la ciudadanía. Pero no se trata de hacer una encuesta de opinión. Hay que decidir pero hay que saber qué tenemos que decidir, cómo y de qué manera, y a partir de una propuesta razonada».
A su entender no hay una receta federalista uniforme para todos los países. Alemania y Brasil son federales pero diferentes. «En Estados Unidos hay estados con pena de muerte y otros que no. En Europa hay muchas competencias que ha ido asumiendo Bruselas. Hace falta un repaso muy detallado sobre el reparto competencial. La educación en Alemania está centralizada, cosa que no aceptaríamos aquí. Por contra, aquí hay un exceso de responsabilidades asumidas por el gobierno central», dijo y denunció, por ejemplo, que el gobierno del PP ha querido controlar las finanzas de los ayuntamientos y las comunidades autónomas.
Resumiendo su intervención, afirmó que «El federalismo es una filosofía de la vida colectiva» y que «el edificio que construimos debe tener que ver con lo que la gente quiere, con la realidad. La realidad actual no incita al optimismo, pero con el pesimismo no se va a ninguna parte. Hay que picar piedra y hablar con todos. Estamos seguros de que el futuro es federal. No hay salida a la crisis que no sea federal».
Por Siscu Baiges
