Opinión

En este país complaciente, que tanto gusta de exhibirse para creerse más fuerte, más bello, más irresistible que ninguno, donde algunos políticos prometen el Paraíso y niegan no solo las piedras del camino sino el camino mismo, hay realidades que estropean la proyección del montaje

 

«La tentación» (El Periódico, 3 de febrer de 2016)