No solo no es cierto que no existan federalistas en Cataluña y en España. La verdad es que la cuestión de la reforma constitucional federal es una idea cada vez más aceptada en el resto de España por instituciones académicas y partidos
Considero el federalismo como la opción política más ética de las que existen. Esto adquiere una especial trascendencia en un día como hoy en que celebramos el Día Mundial del Clima. Al igual que sucede con el medioambiente, existen otros problemas globales como el control internacional del flujo de capitales, la inmigración o la crisis de refugiados en Europa que sólo se pueden resolver con una mayor cooperación entre Estados, con estructuras de tipo federal. No sólo hablo de federalismo en España, sino también del federalismo a nivel europeo y mundial.
Federalistas de Esquerres aglutina actualmente a una gran parte del movimiento federalista catalán aunque el federalismo no es una propuesta nueva ni en Cataluña ni en España. Tiene una larga tradición que se remonta al siglo pasado. Nuestras aspiración es convertirnos en un movimiento de larga duración, cívico, europeísta, federalista y respetuoso con el papel de las instituciones representativas y los partidos políticos.
Los federalistas catalanes nos miramos en el espejo de Quebec y por eso desde nuestro nacimiento hemos organizado actividades con figuras como Stéphane Dion, Jean Leclair o André Lecours y trabajamos de forma estrecha con la Fundación Canadá.
De ellos hemos sacado algunas lecciones. De Stéphane Dion, por ejemplo, hemos aprendido que la doble indentidad supone una riqueza, no un problema. Esto es importante en Cataluña donde las encuestas señalan que un 75% de los catalanes manifiesta tener una doble identidad catalana y española.
De Leclair hemos aprendido que el federalismo no es sólo una mera arquitectura institucional sino que también es una cultura federal que se tiene que ir asentando poco a poco en la sociedad. Él habla de federalismo moral que reconoce que no podemos solucionar los problemas sin colaborar con los otros y que la convivencia es conflictiva en sociedades complejas como la nuestra. El federalismo, nos dice Leclair, afronta los conflictos de una forma distinta, positiva. No cree que existan soluciones mágicas ni definitivas, lo que hace es buscarlas a través de la cooperación, intentando llegar a una solución en común.
El federalismo moral se opone también a la idea del caudillismo, de un líder que guíe a su pueblo, un ejemplo de ello lo tenemos ahora aquí en la defensa a ultranza de la figura de Artur Mas como presidente.
Federalistes d’Esquerres ha tenido que afrontar con frecuencia que nos digan que no hay federalistas en Cataluña. Aunque no somos una organización de masas ni lo queremos ser, sabemos que esto no es cierto porque la idea federal tiene un potencial de aceptación en Cataluña que está entre el 45% y el 60% de los catalanes, según las encuestas.
También nos dicen que el federalismo es una ideología improvisada que nos hemos sacado de la chistera ante el surgimiento del independentismo. Esto tampoco es cierto ya que la tradición federalista en cataluña se remonta al siglo XIX. Ahí tenemos a figuras como la de Pi y Margall.
Nos dicen que no deberíamos querer tener lazos con España que es un país oscuro, atrasado y cerrado. Esto no es cierto porque si bien el gobierno del Partido Popular ha actuado como un muro, España como tal es mucho más plural y esto se podrá ver en los resultados de las próximas elecciones generales.
No solo no es cierto que no existan federalistas en Cataluña y en España, la verdad es que la cuestión de la reforma constitucional es una idea cada vez más aceptada en el resto de España por instituciones académicas y partidos. Incluso dentro de partidos políticos que no se declaran federalistas hay figuras que han comenzado a proponerla.
En este sentido, creemos que nuestra asociación ha conseguido aglutinar diferentes sensibilidades federales dentro y fuera de Cataluña y ha contribuido a que esta cuestión esté presente en el debate.
Ahora confiamos en que las próximas elecciones generales sean una gran oportunidad, especialmente si el Partido Popular no sale elegido, para que se inicie una reforma constitucional que consolide en España un modelo federal que de cabida a las distintas sensibilidades y se adecúe al mismo tiempo a las reformas federales cada vez más urgentes dentro de la Unión Europea.
*Este texto es una adaptación de la intervención hecha por Toni Sitges-Serra en la presentación de Federalistes d’Esquerres en el Campus Universitario de Bellvitge el 20 de noviembre de 2015 (transcripción y edición de Santiago Vallejo y Beatriz Silva)
Federalistes d’esquerres explica en Bellvitge su proposta
Blog Esquerra sense fronteres, 5 de diciembre de 2015
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