Es más que razonable y está plenamente justificado que sea la Audiencia Nacional, como órgano especializado en la gran delincuencia, la que asuma la competencia para profundizar y concluir una investigación penal ya demasiado larga que necesita urgentemente ser concluida. El auto de la juez que ha instruido el ‘caso Pujol’ no deja dudas sobre el entramado delictivo propiciado por la familia. Sería bueno que ese partido llamado CUP conociera mejor los orígenes y el recorrido de sus futuros aliados. «La familia Pujol y la CUP» (El País, 27 de diciembre de 2015)