Comienza cuando alguien entra en el despacho de Jordi Puig, que está dentro del de Jordi Pujol Ferrusola, y roba datos sensibles de un ordenador. Una historia verídica, que he contrastado con muchos protagonistas.
Para los que estaban acostumbrados a un mundo de rosas, donde la corrupción y las jugadas sucias en los negocios y la política parecían ajenos a Catalunya, aun cuesta creer hechos como éste