«Ara és l’hora [Ahora es la hora]» proclama el eslogan de la propaganda independentista. Y acierta, bien que no en el sentido que quisieran darle. Es la hora, sí, pero de la verdad. Es la hora del hundimiento del mito de la superioridad moral del nacionalismo catalán. «La hora de la verdad» (Crónica Global, 13 de agosto de 2014).