El nuevo escenario que se ha abierto en España tras la abdicación del Rey, con la explícita aceptación por parte de prácticamente todos los sectores del arco parlamentario de la necesidad de emprender profundas reformas constitucionales, deja sin efecto las reiteradas afirmaciones del soberanismo según las cuales la independencia era, a la vista del inmovilismo español, la única vía que le quedaba a Cataluña. “¿Última oportunidad para Artur Mas?» (El País, 29 de junio de 2014)