Los graves problemas planteados en la actual crisis del Estado español no pueden ser resueltos con recetas arbitristas: requieren un estudio bidimensional, de la naturaleza de las cuestiones jurídico-políticas que determinan nuestra crisis, y de las experiencias que ofrecen los federalismos consolidados. «El federalismo como cauce alternativo» (El País, 23 de agosto de 2014).